Historias de éxito

En circunstancias ideales, abrir una startup implica un nivel de riesgo que muchas personas simplemente no pueden tolerar. Entre las startups, un restaurante es uno de los más arriesgados.

Pero Dmitry Gorin dejó su bufete de abogados en Siberia en 2010, se mudó a Estados Unidos para perseguir el sueño americano, aunque no hablaba inglés, y decidió dar el salto y emprender su propio negocio abriendo un restaurante en Rehoboth, Delaware. Una decisión así implica asumir un riesgo completamente distinto.

Con la ayuda y el apoyo de su esposa, Oleysa Kochegura, y su amigo y socio, Yauhen Yurhelevich, Dmitry se aventuró en un nicho de mercado (más arriesgado): abrió SEED Eatery en Rehoboth en 2019, dirigido a veganos y vegetarianos, así como a consumidores que buscan alternativas saludables a la carne y los lácteos. El menú incluye ingredientes locales y no contiene gluten, huevo, azúcar ni lácteos.

Desde que llegó a los Estados Unidos, Dmitry ha acumulado una amplia experiencia en ocho años trabajando en la industria restaurantera en una variedad de pequeños cafés, restaurantes de tamaño mediano e incluso en grandes cadenas como Hilton Hotels.

Al mismo tiempo, Yauhen, quien había sido chef en Bielorrusia, perfeccionaba sus habilidades y refinaba su paladar en países de todo el mundo. Al regresar a Estados Unidos, pasó seis años como sous chef y chef, y se forjó una reputación de excelencia en el popular restaurante Houston White Co. de Rehoboth.

Dmitry necesitaba un préstamo para capital inicial y, tras contactar con tres bancos, se dio cuenta de que necesitaba una entidad financiera que asumiera un riesgo calculado en una startup. True Access Capital fue esa entidad.

SEED abrió en febrero de 2019 con un modelo de negocio que consistía en servir un 60 % de comida para llevar y un 40 % de comida en el local. En menos de un mes, se prohibió comer en interiores debido a la COVID-19. Sin inmutarse, Dmitry se puso manos a la obra para crear la tecnología para la comida para llevar sin contacto, incluyendo la creación de un sitio web, la integración con el sistema de punto de venta y el desarrollo de una aplicación móvil en tan solo dos semanas.

Y luego volvimos al negocio y el negocio de comida para llevar estaba en auge.

"Ciertamente no diría que la COVID fue algo bueno", dijo Dmitry, "pero nos obligó a crear la tecnología necesaria para mantener nuestro negocio en marcha. Con la posibilidad de ofrecer comida para llevar, nos mantuvimos activos y conseguimos una clientela local fiel.

Creamos Seed Eatery para quienes aprecian las comidas saludables y equilibradas con verduras coloridas, cereales integrales, grasas saludables y proteínas magras. Todo en nuestro menú es fresco y está hecho desde cero con ingredientes orgánicos y sin OGM, sin colorantes ni conservantes. Nos llena de satisfacción saber que en Seed Eatery se puede comer sano y seguro, dijo Dmitry.